sábado, octubre 28, 2006

Ahorrar un 20 % de energía de aquí al año 2020: la Comisión Europea desvela su Plan de Acción sobre Eficiencia Energética

La Comisión Europea ha presentado hoy su Plan de Acción sobre Eficiencia Energética, como un paso decisivo para resolver los desafíos sin precedentes en materia de energía con los que se enfrenta la Unión Europea.

Bruselas, 19 de octubre de 2006


El Plan incluye un paquete de medidas prioritarias que abarcan una vasta serie de iniciativas dirigidas a ampliar de forma rentable la eficiencia energética. Entre ellas destacan las medidas para hacer que los electrodomésticos, los edificios, el transporte y la generación de energía resulten más eficientes desde el punto de vista energético. Se proponen nuevas normas de eficiencia energética más rigurosas, el fomento de servicios energéticos, y mecanismos específicos de financiación para apoyar productos de mayor eficiencia energética. La Comisión, además, establecerá un Pacto entre Alcaldes de las 20 o 30 ciudades europeas más pioneras en este ámbito y propondrá un acuerdo internacional sobre la eficiencia energética. En total, se presentan más de 75 medidas.

«Es preciso que los europeos ahorremos energía. Europa derrocha como mínimo el 20 % de la energía que consume. Ahorrando energía, Europa contribuirá a solucionar los problemas del cambio climático, además de su creciente consumo y de su dependencia de los combustibles fósiles importados de fuera de la Unión», ha afirmado el Comisario de Energía, Sr. Piebalgs. «La eficiencia energética es crucial para Europa: si actuamos ahora, el coste directo de nuestro consumo energético podría reducirse en más de 100 000 millones de euros anuales de aquí a 2020; además, podrían evitarse la emisión de cerca de 780 millones de toneladas de CO2 al año», ha añadido.

El Plan de Acción, que se pondrá en práctica durante los próximos seis años, es la respuesta al urgente llamamiento lanzado por los Jefes de Estado y de Gobierno en el Consejo Europeo de la primavera pasada en favor de una estrategia realista en materia de eficiencia energética. El Plan hace hincapié en la importancia de establecer unas normas mínimas de eficiencia energética para una amplia serie de aparatos y equipos (desde electrodomésticos como frigoríficos o aparatos de aire acondicionado hasta bombas y ventiladores industriales), así como para los edificios y los servicios energéticos. Conjuntamente con las clasificaciones según rendimiento y los sistemas de etiquetado, las normas mínimas de eficiencia constituyen un poderoso instrumento para eliminar del mercado los productos que consumen demasiada energía, informar a los consumidores acerca de los productos más eficientes y convertir el mercado en un mercado más eficiente desde el punto de vista energético. Se desarrollarán requisitos mínimos de eficiencia para los edificios nuevos y reformados. También se potenciarán los edificios de consumo energético muy bajo (o viviendas pasivas)

El Plan subraya el considerable potencial de reducción de pérdidas en las fases de generación, transporte y distribución de electricidad, y propone instrumentos específicos para mejorar la eficiencia de la capacidad de generación nueva y de la ya existente, así como para reducir las pérdidas por transporte y distribución.

Se propone una serie completa de medidas para la mejora de la eficiencia energética en el ámbito del transporte. El Plan reconoce que puede economizarse energía, en particular, garantizando la eficiencia en el consumo de combustible de los vehículos, desarrollando mercados para vehículos menos contaminantes, comprobando que la presión de los neumáticos es la adecuada, y mejorando la eficiencia de los sistemas de transportes urbanos, ferroviarios, marítimos y aéreos. El Plan reconoce además la importancia de cambiar el comportamiento respecto a los modos de transporte.

El Plan de Acción reclama también señales adecuadas y previsibles en materia de precios, esenciales para la mejora de la eficiencia energética y para el rendimiento económico general.

Asimismo, el Plan incluye una serie de propuestas adicionales para incrementar la sensibilización en materia de eficiencia energética, a través de la educación y la formación. Por último, el Plan pone de relieve la necesidad urgente de abordar los problemas de eficiencia energética a escala mundial, por medio de asociaciones internacionales.

El Plan de Acción sobre Eficiencia Energética, una vez aplicado en su integridad, podrá mejorar la competitividad de la Unión, elevar el nivel de vida de sus ciudadanos, impulsar el empleo e incrementar las exportaciones de tecnologías nuevas y eficientes en cuanto al consumo de energía. A nivel individual, unos pequeños cambios en nuestros patrones de consumo de energía supondrán un ahorro de dinero y la mejora del medio ambiente. Esta será nuestra aportación a nuestros objetivos europeos comunes.

Si desea obtener más información acerca del Plan de Acción, consulte la siguiente página Web:

http://ec.europa.eu/energy/action_plan_energy_efficiency/index_en.htm

MEMO/06/387

.